La hora de irte a dormir es más
importante de lo que piensas, es cuando tu cuerpo entra en un estado de
relajación, se activan las células del crecimiento, y tu cuerpo se
recupera de un día duro. Por eso es muy importante no irte a dormir
cuando tengas el estomago pesado, estés
triste, de mal humor etc... porque cuando te vas a dormir con un
sentimiento negativo estas haciendo que tu cuerpo y tu mente no
descansen y no puedan realizar las funciones correctamente, así que al día siguiente lo más probable es que te levantes irritado.
Debes
pensar que el día no empieza cuando te levantas si no cuando te
acuestas, no estoy diciendo ninguna tontería porque si miramos el
sistema de tiempo que tenemos establecido a las 0.00 de la noche es un
nuevo día.
Lo que intento deciros es que según os vayáis a dormir estáis condicionando a que el día siguiente sea negativo o positivo.
Para
ello he creado un ejercicio muy sencillo, cada noche antes de acostarte
dedica un poco de tiempo a una actividad que te haga feliz, por ejemplo
escuchar tu canción favorita, comer tu comida preferida, dibujar ,
leer, escribir, ver una película, una serie... todo aquello que haga que te sientas bien puedes utilizarlo. Este ejercicio vas a realizarlo hasta que seas capaz de irte a dormir con una sonrisa.
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